La palabra “pollen” procede del latín “pollen-inis”, que significa “flor de la harina” o “polvo muy fino”. Los granos de polen son partículas fecundantes con potencialidad masculina, nece- sarios para la reproducción de las plantas superiores ya que su misión es la de fecundar a los óvulos para dar lugar a la formación de semillas y asegurar, así, la continuidad de la especie.
En algunas especies el polen realiza su función en la misma flor o en la misma planta que lo ha formado, pero en la mayoría de las especies, el polen resulta viable si alcanza una ovocélula de otra planta de su misma especie.
El polen se forma en unas bolsitas o vesículas llamadas sacos polínicos que, en las plantas más evolucionadas, las angiospermas, se sitúan en los estambres de las flores.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario